Desde que yo nací gracias a muchos profesionales estoy aquí
Primero fue un doctor junto con una matrona los que me enseñaron la luz del camino que ando ahora.
Tenia frío y lloraba un montón así que a un gentil comerciante mi madre le compro ropa para abrigarme y un chupete multicolor.
Necesitaba comer para ser un campeón y un ganadero rumboso una vaca ordeño.
Después vinieron los dientes y gracias al agricultor comí mucha verdura para crecer un montón
Al probar sabores uno que me entusiasmo fue el del pescado que aquel pescador en sus redes capturo.
No todo era comer también tenia otras necesidades como la de aprender, y vine a este colegio en el que ahora me podréis ver
Así que los libreros tuvieron que colaborar necesitaba libros y cuadernos en los que poder pintar.
Al señor sastre tuve que visitar pues en el colegio uniforme he de llevar.
El peluquero se encargo de peinarme despacito y por eso siempre voy peinadito.
Los profesores me enseñan todos los días y a mi eso me produce mucha alegría.
Muchos amigos me he ido encontrando y para no perderlos cartas les voy mandando que las lleva un cartero que recorre el mundo entero.
Desde muy pequeñito como me gustaba leer hablé con un bibliotecario y libros empecé a coger.
Me encanta jugar en el parque de mi barrio y los jardineros se encargan de cuidarlo.
Tengo muchos enchufes y luces en mi habitación un simpático electricista fue quien los instalo.
Cuando me asomo a la ventana muy lejos puedo ver ya que el cristalero los limpio ayer.
Los curas y las monjas nos enseñan a rezar para ser respetuosos y ciudadanos de verdad.
Y sobre todo las gracias he de dar a informáticos, programadores, diseñadores y demás que sigan creando consolas y ordenadores que es lo que mola más.
Y también a mis papas que me llenan de amor y me tratan genial, me enseñan muchas cosas y me dicen sin cesar se tú mismo y todo llegará.
